No existe un método rápido y seguro para bajar la presión arterial fuera de un entorno médico. Sin embargo, hay cambios en el estilo de vida que pueden reducir la presión arterial con el tiempo: el ejercicio, la dieta y las prácticas para reducir el estrés.

Esto es meramente para fines informativos. Este artículo no proporciona un diagnóstico ni un respaldo de cualquier tratamiento. Procura buscar consejo médico para cualquier índole de salud.

Para que el personal médico logre bajar tu presión arterial de manera segura, llama a urgencias si experimentas estos síntomas:

• Lectura de presión arterial superior a 180/120
• Dolor intenso de cabeza
• Dolor en el pecho
• Sensación de falta de aliento
• Náuseas
• Pérdida de equilibrio

Es posible que desees encontrar formas de reducir tu presión arterial si tienes una lectura muy alta. No obstante, es imposible bajar la presión arterial fuera de un entorno de atención médica de una manera confiable, segura y rápida.

La buena noticia es que hay una solución. La presión arterial puede reducirse de forma segura en un período de días o semanas. Aprende cómo manejar este parámetro de manera segura.

Factores que contribuyen a la presión arterial alta

Puedes haber experimentado un aumento de presión arterial breve, durante el ejercicio o después de tomar café. La condición de la hipertensión ocurre cuando tu presión arterial permanece alta sin importar las circunstancias.

Entre las causas de la hipertensión se encuentran:

• Estar genéticamente predispuesto
• Consumir demasiada sal en la dieta
• Tener sobrepeso u obesidad
• Beber cantidades excesivas de alcohol
• Sufrir apnea obstructiva del sueño
• Hacer actividad física insuficiente (sedentarismo)
• Tomar ciertos medicamentos: descongestionantes (pseudoefedrina), medicamentos para el TDAH (sales de anfetamina), antiinflamatorios no esteroideos (AINE) o esteroides (prednisona)

¿Qué se considera como una presión arterial alta?

Las lecturas de la presión arterial se calculan utilizando las lecturas sistólica y diastólica (números superior e inferior). El parámetro normal (menos de 120/80) se define por la American Heart Association (AHA). En cambio, la alta posee níveles superiores a 130/80.

¿Esta presión arterial alta es un factor de riesgo?

Si eres susceptible a desarrollar hipertensión (presión arterial alta) puedes padecer problemas cardíacos, accidentes cerebrovasculares y problemas renales. Los factores genéticos o de estilo de vida pueden contribuir a la gravedad del riesgo. Asegúrate de conocer los detalles de tu salud, así podrás tomar medidas para prevenir futuros problemas de salud.

¿Es seguro bajar rápidamente la presión arterial?

No es buena idea tratar de bajar la presión arterial rápidamente. Lo más oportuno siempre es mantener un nivel estándar en la presión arterial. Es peligroso bajarla drásticamente.

La sangre del corazón y los vasos sanguíneos transportan oxígeno y nutrientes a los riñones, los pulmones y el cerebro. Si esto cae con brusquedad, es posible que estos órganos no reciban el flujo continuo de sangre y oxígeno que necesitan.

Eventualmente esto puede producir un accidente cerebrovascular, daño cerebral permanente y daños a los órganos y tejidos. En esta situación, los pacientes deben bajar la presión arterial con bastante lentitud y permitir un monitoreo continuo en un entorno clínico.

Baja naturalmente tu presión arterial con el tiempo

Sabemos que no existe una forma infalible, segura y rápida de bajar la presión arterial. Sin embargo, hay maneras naturales de hacerlo con el transcurso del tiempo:

• Haz ejercicio todos los días. Bajar la presión arterial con ejercicio es seguro y eficaz. Puedes mejorar la salud de tu corazón si realizas actividad física durante al menos 30 minutos todos los días.
• Reduce tu consumo de sodio (sal). La American Heart Association recomienda mantener un consumo de sodio por debajo de los 1500 mg por día. La dieta DASH, por ejemplo, es un plan de alimentación bajo en sodio.
• No tomes más de 1 o 2 bebidas alcohólicas al día. También puedes aumentar de peso si bebes alcohol, lo que puede aumentar este parámetro.
• Prioriza la reducción del estrés. Es posible que experimentes presión arterial elevada temporalmente cuando estás estresado. Puedes sufrir hipertensión si estás estresado todo el tiempo. Haz algo relajante todos los días para aliviar el estrés. Toma un baño tibio, camina al aire libre y escucha música relajante para reducir tus niveles de estrés.

¿Cómo bajar tu presión arterial cuando está peligrosamente alta?

El llamado «asesino silencioso», es decir, la presión arterial alta, por lo general no tiene muchos síntomas. Cuando tiene síntomas ya es preocupante: dolor de cabeza, dolor en el pecho, dificultad para respirar, náuseas y pérdida del equilibrio.

Si tu presión arterial sistólica (número superior) o presión arterial diastólica (número inferior) es superior a 180 o 120, puedes estar experimentando una «crisis hipertensiva».

No intentes por tu cuenta bajar tu presión arterial en este escenario. Si experimentas una crisis hipertensiva, debes buscar atención médica y profesional de inmediato.

Al acudir al hospital por presión arterial alta, programa una cita con tu médico de confianza dentro de una semana. Sus recomendaciones pueden ayudar a controlar tu presión arterial desde el hogar.

¿Qué hacer cuando tu presión arterial aumenta justo antes de visitar a un médico?

Esto se le conoce como «síndrome de bata blanca» (white coat syndrome). Tu presión arterial oscila entre normal y alta en el hogar, pero es significativamente más alta en entornos médicos, como hospitales o consultorios médicos. Estos lugares pueden propiciar tu ansiedad o nerviosismo.

Este síndrome afecta aproximadamente al 15% de los pacientes con presión arterial alta en el consultorio médico.

Trata de relajarte tanto como sea posible antes de que te midan la presión arterial. Puedes reducir las posibilidades de que el síndrome de la bata blanca aumente falsamente este parámetro. Intenta lo siguiente:

• Llega a tu cita con tiempo suficiente. Así no estarás estresado mientras conduces, te estacionas y encuentras el consultorio. Si necesitas ayuda para mantener la calma, trae a un amigo contigo.
• Antes de asistir a tu cita completa el papeleo con anticipación.
• Cuando ya estés en la sala de espera, medita en silencio o escucha música con audífonos.
• Respira profundamente antes de la medición. Asegúrate de apoyar ambos pies en el suelo.
• Pregunta a tu médico si puedes comprar en la farmacia un monitor de presión arterial. Así podrás controlar tu presión arterial durante el transcurso de un día normal. Una lectura más precisa ayudará a tu médico a determinar si el estrés de estar en un entorno de atención médica contribuye a una presión arterial elevada.

10 Métodos para bajar tu presión arterial de manera gradual

1. Logra un peso más saludable

Cada diez kilos perdidos tu presión arterial sistólica (el primer número en los resultados de tu presión arterial) disminuirá entre cinco y veinte puntos. La pérdida de peso de tan solo cinco kilos puede ayudar a reducir este parámetro en personas con sobrepeso.

El objetivo es reducir tu índice de masa corporal (IMC) de 18,5 a 24,9.

La pérdida de peso ayudará en caso de sufrir apnea del sueño, el padecimiento donde la respiración se detiene de forma intermitente mientras duerme y provoca que el corazón lata con irregularidad.

Baja de peso lentamente con una combinación de alimentación saludable y ejercicio. Tu presión arterial bajará por sí sola si lleva un seguimiento de tu peso. Controla esto en casa y sigue poco a poco tus objetivos.

2. Consume una dieta saludable

Hay un plan de dieta llamado DASH (Enfoques dietéticos para detener la hipertensión) que muchos consideran la forma más efectiva de controlar y reducir este nivel. Sigue este programa y observa cómo tu presión arterial sistólica desciende de 8 a 14 puntos.

Tus principios básicos son evitar o limitar:

• Alimentos ricos en grasas saturadas y grasas totales
• Alimentos procesados
• Comida dulce
• Sal
• Carbohidratos en exceso
• Cafeína
• Alcohol (dos tragos o menos por día para hombres y no más de un trago para mujeres)

Además de eso, tu dieta debe incluir:

• Los antioxidantes que se encuentran en frutas y verduras, particularmente en bayas.
• Cereales integrales
• Frutos secos sin sal, ricos en proteínas
• Verduras de hoja verde y los frijoles, ricos en potasio y magnesio.
• Yogures bajos en azúcar, ricos en calcio

3. Haz ejercicio con regularidad

El alma gemela de una dieta saludable es el ejercicio. Si haces ejercicio y mantienes una dieta saludable, es más probable que pierdas peso. La recomendación oficial es hacer ejercicio durante al menos 30 minutos la mayoría de los días de la semana. Esto puede reducir la presión arterial de cuatro a nueve puntos. Recuerda, el ejercicio es más que un entrenamiento en el gimnasio. Puedes hacer tareas del hogar o jardinería. Caminar, bailar, trotar, andar en bicicleta y nadar son buenas actividades aeróbicas que aceleran el ritmo cardíaco.

4. Limita tu consumo de sodio

La Asociación Estadounidense del Corazón recomienda a las personas con hipertensión que mantengan su consumo de sodio por debajo de los 1,500 miligramos al día. Consulta la información nutricional en las etiquetas de los alimentos. Reducir lentamente su consumo reduce sus posibilidades de notar la diferencia.

Prepara tu propia comida si quieres reducir el consumo. Las comidas fuera de casa y los alimentos empaquetados ​​representan el 75 % de la ingesta de sodio. En lugar de sal, usa más especias.

Es importante consumir alimentos ricos en potasio (como plátanos, pasas, atún y leche) para ayudar a eliminar el sodio de tu sistema. Se pueden bajar de dos a ocho puntos con un pequeño esfuerzo.

Hay varias formas de minimizar la sal furtiva mientras se agrega un sabor saludable:

• Lee las etiquetas. Busca sal, sodio, sal marina y sal kosher.
• Enjuaga los alimentos enlatados salados como el atún o los frijoles antes de comerlos.
• Al cocinar, cambia el sodio y la sal por hierbas y especias.
• Las guarniciones con mucha sal suelen ser instantáneas o de sabores. En lugar de guarniciones saladas, prepare arroz, pasta o cereales. Al momento de servir, puedes agregar condimentos o muy poca sal.
• En las etiquetas de los alimentos, busca que diga «bajo en sodio».

5. Relájate y reduce el estrés

La reducción del estrés ayuda a mantener la presión arterial normal. Haz ejercicios como el yoga y el tai chi, medita o escuchar música relajante, todas son buenas formas de reducir el estrés. Se demostró que tocar música proporciona beneficios similares a los de la actividad física.

Al sentarse al sol, se liberan endorfinas y se reduce la presión arterial.

Asegúrate de tener una red de apoyo. La familia y los amigos pueden alegrar tu estado de ánimo. Puedes lidiar con el estrés de muchas maneras:

• Determina qué es importante para ti y no te presiones demasiado.
• Controla lo que puedas.
• Busca maneras de aliviar tu estrés. Si necesitas encontrar una solución, puedes beneficiarte de compartir ideas con un compañero de trabajo o un miembro de la familia.
• Si eres consciente de que alguien o algo te provoca estrés, debes evitarlo en la medida de lo posible.
• Toma un descanso para hacer algo que disfrutes durante el día. Considera dar un paseo o encontrar un lugar tranquilo para meditar.
• Puedes mejorar tu estado de ánimo y de tu entorno si expresas tu gratitud.

6. Reduce tu consumo de alcohol

Si te limitas a una bebida alcohólica al día (para mujeres) o dos bebidas alcohólicas (para hombres), puedes bajar tu presión arterial sistólica de 2 a 4 puntos. La cantidad estándar de una bebida es de 12 onzas de cerveza, 5 onzas de vino o 1,5 onzas de licor de 80 grados.

7. Deja de fumar

Dejar de fumar es probablemente lo mejor para tu corazón, es bueno para su bienestar general. Fumar no solo te daña con el tiempo, sino que también aumenta este parámetro. Consulta a tu médico para obtener ayuda y estrategias para dejar esa adicción.

8. Medicamentos recetados

Algunas personas pueden controlar su presión arterial solo con cambios en el estilo de vida. Sin embargo, otras personas también necesitan medicamentos. Asegúrate de seguir exactamente las instrucciones de su médico. Cuando te medicas no debes reducir dosis ni omitir días. Puedes usar pastilleros diarios o recordatorios electrónicos para ayudarte a recordar tus dosis.

9. Suplementos y vitaminas

Algunas vitaminas y minerales ayudan a reducir la presión arterial, según una investigación. Debes consultar a su médico antes de tomar cualquier vitamina. Diles todo lo que tomas.

La vitamina C protege el revestimiento de los vasos sanguíneos con antioxidantes. Las frutas y verduras como el brócoli, la col rizada, los tomates y los pimientos rojos dulces también son ricos en vitamina C, al igual que el jugo de naranja y el jugo de kiwi.

Un adulto necesita 400 mg de vitamina C al día.

Te deshaces del sodio a través de la orina al consumir potasio. Las mujeres deben apuntar a 2600 mg al día, mientras que los hombres deben tomar 3400 mg. Es un nutriente esencial que se encuentra en frutas y verduras como plátanos, ciruelas pasas, papas, tomates y alcachofas.

La vitamina D en este alimento contribuye a la producción de la enzima renina. En cambio, la vitamina D se puede encontrar en los pescados grasos, como el salmón y la caballa, y en la leche. La luz solar y los suplementos también pueden proporcionar vitamina D.

10. Cuida tu sueño

El sueño también hace que baje la presión arterial, al igual que los latidos del corazón y la frecuencia respiratoria. Este nivel permanecerá alto si no duermes lo suficiente. Las hormonas del estrés también pueden verse afectadas por la falta de sueño, lo que también puede influir.

Lo mejor es seguir un horario regular, hacer ejercicio temprano en el día y evitar comer o beber demasiado cerca de la hora de acostarse.

En resumen

La presión arterial alta no se puede bajar de manera segura y efectiva en el hogar. Para bajar la presión arterial debes hacer pequeños cambios durante varios días o semanas. De esta manera tu cuerpo podrá adaptarse a los cambios con calma. Cuando es peligrosamente alta debes ir al hospital.

Cada vez que bajes tu presión arterial en casa, asegúrate de mantener al tanto a tu médico. Habla con tu proveedor de atención médica sobre cómo puedes mejorar tu dieta y aumentar tu actividad física poco a poco. Las recomendaciones en estos rubros pueden diferir de una persona a otra. Es vital que discutas tus planes para reducir su presión arterial con tu médico, confirma que son seguros y adecuados para ti.

Recuerda que este artículo es meramente informativo. Aquí no es posible proporcionar un diagnóstico ni un respaldo de cualquier tratamiento. Siempre busca el buen consejo médico.

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