¿Te gustaría saber qué vitaminas potencian el sistema inmunológico en personas enfermizas? Con los nutrientes adecuados puedes mantener un estilo de vida saludable.
La mayor parte del tiempo no estamos en ambientes estériles y 100% higiénicos. Así, nuestros cuerpos están expuestos a microbios dañinos que siguen evolucionando para infectarnos con mayor efectividad.
A menudo hacemos todo lo que está a nuestro alcance para prevenir o reducir la gravedad de enfermedades. Usamos ropa abrigable, tomamos tés y buscamos reducir nuestro estrés. No obstante, ¿has pensado en las vitamimas que pueden estimular tu sistema inmunológico? ¿Qué tan efectivas son?
Si decides que te gustaría probar un suplemento o vitamina, habla primero con tu doctor o con tu nutriólogo profesional. Aunque algunos de ellos puedan tener propiedades antivirales, ninguno tiene evidencia científica contra el COVID-19 y demás enfermedades graves.
Los detalles de una dieta balanceada y las vitaminas
Muchas veces olvidamos que nuestra salud depende en gran medida de la nutrición. Estudios han demostrado que comer más alimentos integrales y obtener suficiente proteína es crucial para la longevidad.
Para mantener nuestro sistema inmunológico en óptimas condiciones, debemos proporcionarle nutrientes específicos. Nuestra dieta es el sistema más complejo de nuestro organismo, a la par de nuestra logística mental.
Aquí examinaremos las vitaminas que pueden estimular tu sistema inmunológico y los nutrientes esenciales para mantener una buena salud, sobre todo si te consideras enfermizo.
¿Las vitaminas son buenas para tu Sistema inmune?
Al estar en contacto con bacterias o virus, tu sistema inmunológico trabaja incansablemente para combatir cada uno de estos obstáculos.
Muchos factores influyen en tu sistema inmunológico: tu composición genética, edad, estado de salud y nivel de estrés.
Un sistema inmunológico saludable depende en gran medida de la dieta. Las dietas occidentales modernas son ricas en azúcar, sal y grasas, y estan contribuyendo al aumento de enfermedades crónicas a nivel mundial.
Para mantenerte saludable y fuerte, tu cuerpo necesita nutrientes. Sin embargo, no es tan simple como tomar un multivitamínico todas las mañanas para apoyar al sistema inmunológico. Para mayor efectividad a favor de tu inmunidad, debes realizar cambios duraderos y de gran alcance en tu dieta.
Aborda tus deficiencias de vitaminas y minerales. Así, existen micronutrientes que aportan a las defensas de tu cuerpo: fortalece sus barreras físicas, aumenta la producción de anticuerpos y mejorar la comunicación entre las células.
¿Cómo puedes agragar las vitaminas a tu dieta?
Además de considerar los suplementos vitamínicos, necesitas mantener una dieta sana y equilibrada, así podrás asegurar una ingesta adecuada de nutrientes esenciales. El cuerpo absorbe y utiliza mejor las vitaminas que provienen de alimentos que de suplementos, ya que pueden diferir en la calidad de dichos nutrientes.
Los suplementos son útiles como un plus a una dieta saludable, no la sustituyen.
Tu sistema inmunológico (células, procesos y sustancias químicas), ya se defiende constantemente de virus, toxinas, bacterias y otros patógenos.
De hecho, se recomienda mantener un balance sano, no estimular de más el sistema inmunológico.
Las intervenciones de nutrición y estilo de vida deben combinarse para crear este equilibrio. Para lograrlo, lo más óptimo es un horario de sueño constante y total, reducir el estrés a largo plazo, hacer ejercicio, tener contacto con seres queridos y comer con atención.
Debes tener en cuenta que sólo algunos suplementos pueden interactuar con medicamentos. Es posible que las personas con ciertas condiciones de salud no puedan usar suplumentos. Antes de cualquier cambio a tu organismo consulta con tu doctor.
Los micronutrientes contribuyen a las defensas naturales del cuerpo, pero cada cuerpo requiere de unas vitaminas más que de otras. Para que exista vida en nuestro planeta, las vitaminas son esenciales. Aquí veremos las principales.
Vitamina C
Los medicamentos para la gripe a menudo contienen vitamina C o ácido ascórbico. La mala función inmunológica y la susceptibilidad a las infecciones se relacionan con la deficiencia de esta vitamina.
- Se recomiendan de 75 a 90 mg de ácido ascórbico al día. Asimismo, los suplementos de vitamina C te ayudan a recuperarte más rápido de una infección.
- Múltiples niveles de vitamina C apoyan el sistema inmunológico. Además de proteger contra el estrés oxidativo, también fortalece los glóbulos blancos.
- La vitamina C puede reducir la inflamación pulmonar, por lo que puede ayudarte a lidiar con el COVID-19.
- Protege contra el dañino estrés oxidativo.
- Ayuda a regenerar nuevas células, eliminar las viejas y reemplazarlas.
Además, se sabe que la ingesta regular de este suplemento redujo la aparición de resfriados hasta en un 50 % entre maratonistas y soldados sometidos a gran estrés físico.
Por si fuera poco, el tratamiento con dosis altas de vitamina C por vía intravenosa mejora significativamente las infecciones graves, como sepsis y síndromes de dificultad respiratoria aguda.
Alimentos con mayor concentración de ácido ascórbico:
- Cítricos: las naranjas contienen casi 70 mg de vitamina C por tamaño mediano.
- Frutas: las guayabas, por ejemplo, contienen 228.3 mg por cada 100 gramos, muy por delante del kiwi (93 mg) y la papaya (70 mg)
- Las verduras: en un pimiento morrón es de aproximadamente 65 mg, mientras que por 100 gramos de brócoli es de aproximadamente 89 mg de vitamina C.
Vitaminas B
Cada uno de los ocho tipos de vitaminas B juega un papel diferente en los procesos metabólicos. Nuestros cuerpos no podrían moverse, pensar, construir o reparar ningún tejido sin las vitaminas B.
Una deficiencia de ácido fólico, B6 y B12 afecta la producción y actividad de los glóbulos blancos y demás respuestas inmunitarias. Además, puede causar hiperhomocisteinemia, aumentar la inflamación en el cuerpo y desencadenar una variedad de enfermedades delicadas.
La mayoría de los alimentos integrales contienen vitaminas B. Su ingesta diaria recomendada se logra con facilidad con granos integrales, carne, huevos, legumbres, semillas, nueces, frutas y vegetales de hojas oscuras.
Vitamina D
La vitamina D ya ayudaba al tratamiento de la tuberculosis antes de introducir antibióticos. El aceite de hígado de bacalao y la exposición a la luz solar contienen esta vitamina.
Existe evidencia de que la deficiencia de vitamina D aumenta el riesgo de desarrollar trastornos autoinmunitarios como la psoriasis, la esclerosis múltiple y la artritis reumatoide. Este micronutriente activa los glóbulos blancos y fortaleciendo nuestra resistencia a diversas enfermedades.
Alimentos con vitamina D:
- Carne roja
- Hígado
- Yemas de huevo
- Pescado como el salmón, las sardinas y la caballa
- Si no quieres ingerir alimentos de origen animal: los cereales, la leche de origen vegetal y los champiñones suelen estar fortificados con esta vitamina.
La Vitamina D te ayuda a prevenir infecciones del tracto respiratorio y mejoran la eficacia de tratamientos antivirales en personas con ciertas infecciones, como el VIH y la hepatitis C.
Debido a su efecto en el sistema inmunológico, se han hecho investigaciones en su relación con el COVID-19. Así, se ha demostrado que la vitamina D acelera la curación y evita la inflamación en el sistema respiratorio. Se recomiendan suplementos de vitamina D para protegerte contra el virus.
Zinc
El Zinc es uno de los más importantes nutrientes. Nuestros sistemas nervioso y reproductivo lo requieren para su crecimiento, desarrollo y correcta función.
Es fundamental para el desarrollo y comunicación de las células inmunitarias, y para la regulación de la inflamación. Además, protege los tejidos del cuerpo de patógenos extraños.
El Zinc afecta directamente a los glóbulos blancos. Además, actúa como inmunoestimulante, un componente que mejora la eficacia del sistema inmunitario y la lucha contra el resfrieado común.
Se ha demostrado que el buen uso del Zinc incluye propiedades anticancerígenas, principalmente al proteger y reparar las cadenas de ADN.
Así, el Zinc se puede encontrar en cereales integrales y productos lácteos, pero también en la carne, las lentejas y los frutos secos.
Con una deficiencia de Zinc eres más propenso a contraer neumonía y registra un 16% de todas las infecciones respiratorias graves en todo el mundo. Y su ausencia es sumamente común en adultos mayores, con excepción de los países desarrollados.
Su dosis diaria no debe exceder los 40 mg.
Saúco
El Saúco se usa para tratar infecciones. Ahora mismo el “Sacumbucus nigra” (saúco negro) se está estudiando por sus propiedades inmunoestimulantes.
Es un potente antibacteriano y antiviral contra patógenos bacterianos que causan infecciones del tracto respiratorio superior y cepas de influenza. Esta respuesta del sistema inmunitario reduce la duración y la gravedad de los resfriados, así como los síntomas de infecciones virales.
Aunque se ha sugerido la baya del saúco, también se deben considerar los riesgos. Se ha informado que esta baya produce un exceso de citocinas, mismas que podrían dañar las células sanas.
Consulta a un profesional de la salud antes de usar saúco.
¿Hongos medicinales?
Desde la antigüedad, los hongos medicinales tratan y previenen infecciones.
Ciertos tipos de hongos medicinales pueden mejorar la salud inmunológica y reducir los síntomas de afecciones como el asma y las infecciones pulmonares.
Por ello, sus propiedades inmunoestimulantes se han estudiado ampliamente. Así, se ha investigado que el sistema inmunológico se ve reforzado por más de 270 especies conocidas de hongos medicinales.
Entre los hongos medicinales se encuentra el cordyceps, melena de león, maitake, shitake, reishi y cola de pavo. Por su parte, la cola de pavo puede mejorar la respuesta inmune en humanos, especialmente en pacientes con cáncer.
Otros suplementos y vitaminas que estimulan el sistema inmunológico
- Astrágalo. Se usa sobre todo en la medicina tradicional china. Su extracto puede tener un impacto significativo en las respuestas inmunes en animales.
- Selenio. Esencial para mantener saludable el sistema inmunológico. Puede mejorar las defensas antivirales contra las cepas de influenza H1N1.
- Ajo. Un poderoso antiinflamatorio y antiviral. Estimula glóbulos blancos protectores y mejora la salud inmunológica. La investigación humana todavía es limitada.
- Regaliz. Tiene efectos antivirales que pueden atribuirse a su glicirricina. Esto exhibe actividad antiviral contra el síndrome respiratorio agudo severo, según estudios.
- Pelargonium sidoides. El extracto puede ayudar a aliviar los síntomas de infecciones respiratorias virales agudas. Todavía necesita más investigación.
- Curcumina (cúrcuma). Los estudios en animales sugieren que mejora la función inmunológica con propiedades antiinflamatorias.
- Propóleo. Producido por las abejas como un sellador de colmenas similar a la resina. A pesar de sus propiedades para mejorar el sistema inmunológico y sus posibles propiedades antivirales, necesita más investigación.
Es importante considerar que muchos de los efectos potenciales de estos suplementos no se han probado exhaustivamente en humanos y necesitan de mayor investigación.
En resumen
Hay una serie de suplementos disponibles en el mercado que pueden ayudar a mejorar la función inmunológica.
Se han realizado investigaciones sobre sus propiedades favorables para el sistema inmunitario. A pesar de sus posibles beneficios para la salud inmunitaria, estos suplementos y vitaminas no deben utilizarse como sustituto de un estilo de vida saludable.
Para mantener un sistema inmunológico saludable y reducir el riesgo de infecciones y enfermedades, debes tener una dieta balanceada en nutrientes, dormir lo suficiente, realizar actividad física regular y evitar fumar.
Si decides que te gustaría probar un suplemento o vitamina, habla primero con tu doctor o con tu nutriólogo profesional. Aunque algunos de ellos puedan tener propiedades antivirales, ninguno tiene evidencia científica contra el COVID-19 y demás enfermedades graves.
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