A veces no es fácil comprender totalmente la importancia de una buena salud mental y todo lo que implica.
Tener una buena salud mental no se trata sólo de no tener enfermedades mentales. Todo ser humano necesita tener un sentido de propósito e involucrarse en aquello que le genere un estado óptimo. También implica tener un buen manejo de estrés y sus contratiempos.
Para una persona sana mentalmente es necesario tener la capacidad de formar relaciones cercanas y estar en contacto con sus sentimientos y pensamientos.
¿Qué es la salud mental?
Se describe la salud mental como un estado de salud emocional, psicológica y social. Afecta nuestra forma de pensar, sentir y actuar. Por ello, la necesitamos a lo largo de toda la vida. La salud mental también influye en nuestro manejo del estrés, la forma en que nos relacionamos y tomamos decisiones.
Las enfermedades mentales y la mala salud mental no son necesariamente lo mismo, aunque los términos a menudo se mezclan.
Puede ser que una persona experimente una mala salud mental, pero no tenga un diagnóstico de enfermedad mental. También alguien que padece enfermedades mentales puede experimentar bienestar físico, mental y social.
¿Qué causa la mala salud mental?
Para las personas afectadas por esto pueden experimentar dificultad para enfrentar las presiones diarias del hogar, el trabajo o la escuela.
A veces los días malos pueden volverse malas semanas y luego malos meses. De repende no está bajo control lo que pensabas que sí lo estaba.
Las personas con enfermedades mentales sufren de pensamientos, sentimientos, estados de ánimo o comportamientos inestables.
Las enfermedades mentales más comunes son depresión, ansiedad, trastorno bipolar y esquizofrenia. Estas condiciones afectan la capacidad de una persona para funcionar diariamente y relacionarse con los demás, a corto o largo plazo.
¿Cómo reconocer si no estás afrontando bien un problema?
Cuando no tienes una buena salud psicológica, podrías experimentar estos síntomas:
- Sensación de cansancio y opresión en el pecho en cuanto despiertes.
- Sudores fríos y dolores de cabeza.
- Tu mente repasa las cosas una y otra vez
- Agotamiento y enojo
- No tienes sueño o no puedes concentrarte
- Pensamientos inusuales y demasiada preocupación por lo opinión de los demás
Tu salud mental puede estar en riesgo si continúas experimentando síntomas así.
Pero no estás solo, miles de personas sufren problemas mentales todos los años.
Enfrenta las enfermedades mentales
Cuando no tratas una enfermedad mentales los síntomas pueden empeorar con el tiempo. Es posible que necesites ayuda psicológica en algún momento.
Consulta a tu médico de atención primaria si no sabes por dónde empezar. Te puede dar el diagnóstico inicial y la derivación a un psicólogo o psiquiatra.
No pienses que es demasiado tarde, aún existe la esperanza de tener una vida plena y feliz, incluso si sufres de una enfermedad mental. Sin embargo, será más fácil si manejas tu condición con un equipo de salud mental.
Síntomas de enfermedad mental
Existen diferentes síntomas asociados a diferentes tipos de enfermedades mentales. Pero tienen algunos elementos en común, como:
- Comer demasiado o muy poco
- Dormir demasiado o padecer insomnio
- Evitar tus actividades normales
- Alejarte de personas cercanas
- Sentir fatiga aunque duermas suficiente
- Ausencia de empatía o sensibilidad
- Sufrir dolores corporales inexplicables
- Sentir impotencia, desesperanza o pérdida
- Fuman o beber en exceso
- Usar drogas ilícitas que nunca habías probado
- Sentirse confundido, olvidadizo, irritable, enojado, ansioso, triste o asustado
- Tener discusiones y peleas con amigos y familiares todo el tiempo.
- Pasar por problemas de relación causados por cambios de humor
- Pensar continuamente en eventos pasados
- Tener voces incontrolables en tu cabeza
- Sufrir de pensamientos de autolesión o de daño a otros
- Sentir la incapacidad para realizar actividades diarias
Puedes atravesar estos síntomas debido a momentos de estrés o angustia emocional. Es posible que tenga dificultades para mantener tus actividades normales o tu carácter de siempre.
Asociamos sobre todo las crisis nerviosas o mentales a estos períodos.
Evalúa tu salud mental
El diagnóstico de los trastornos mentales implica varios pasos. Puedes someterte a un examen físico para verificar si tus síntomas incluyen problemas físicos.
Puesto que algunas enfermedades mentales tienen repercusiones neurológicas u hormonales menos obvias, tu médico puede ordenar pruebas de laboratorio subyacentes.
También es posible hacer una evaluación o examen psicológico. El diagnóstico podría tardar algunas citas. Es un problema complejo, pero es necesario tener paciencia para que puedan derivarte a los expertos en salud mental, de acuerdo a tus síntomas y tus necesidades.
Tratamiento para una buena salud mental
A cada persona le afectan los síntomas psicológicos de diferente forma. No hay un tratamiento único para todos los trastornos mentales.
Los tratamientos reducen los síntomas y algunos los controlan. Después será posible abordar las causas subyacentes y controlar la afección de forma efectiva.
Es necesario trabajar junto con tu médico y desarrollar un plan. El enfoque multiángulo puede ser el más efectivo para algunas personas. Los tratamientos psicológicos incluyen:
Medicamentos
Hay cuatro tipos principales:
- Antidepresivos
- Medicamentos contra la ansiedad
- Medicamentos antipsicóticos
- Estabilizadores del estado de ánimo
Tus síntomas determinarán lo que es mejor para ti. Es necesario probar varios medicamentos en diferentes dosis antes de encontrar el correcto.
Psicoterapia
La terapia te brinda la oportunidad de hablar sobre tus experiencias, sentimientos, pensamientos e ideas con un profesional de la salud mental.
La función principal del terapeuta es actuar como un mediador neutral y ayudarte con el desarrollo de estrategias y mecanismos de afrontamiento.
Aquí se tratan trastornos de pánico, de ansiedad, de depresión, problemas de ira, trastornos bipolares y trastorno de estrés postraumático. La terapia identifica problemas de salud mental y los patrones de pensamiento poco saludables. Es posible que puedas cambiar estos pensamientos y comportamientos durante las sesiones con tu terapeuta.
La terapia se enfoca en problemas actuales y cómo impactan tu vida diaria. Es beneficioso para ayudarte a encontrar soluciones en tiempo real, con un enfoque diferente.
Estadía en hospitales e instalaciones residenciales
Esto puede ser temporal para algunas personas. Se indica para un tratamiento intensivo durante ciertos períodos de tiempo, como un programa. Según el paciente se recomiendan diferentes programas, horarios y tratamientos mezclados.
Tratamientos de estilo de vida y remedios caseros
NO SE RECOMIENDA COMO TRATAMIENTO ÚNICO. Es un complemento al tratamiento convencional, una alternativa. No elimina los problemas mentales con estos pasos, pero pueden ayudar.
Debes adherirte estrictamente a tu plan de tratamiento, evitar el alcohol y las drogas, y adoptar un estilo de vida saludable. Es necesario para incorporar alimentos que estimulen el cerebro, que incluyan ácidos grasos omega 3.
Primeros auxilios
Aquí podemos aprender sobre señales de advertencia y factores de riesgo de los problemas mentales. Las personas con trastornos psicológicos aprenden sobre tratamientos y enfoques.
Aquellos que trabajan en entornos de atención médica regularmente deben tomar este programa de capacitación. El proveedor de atención médica aprende cómo conectar a una persona en crisis con pasos de tratamiento profesional y de autoayuda. Incluye escenarios y juegos de roles.
Ejercicios de salud mental
El ejercicio físico es un beneficio físico y psicológico. Actividades como bailar, nadar, caminar y trotar mejoran la salud y la fuerza cardiovascular.
Las actividades físicas son geniales para tu mente. También los síntomas de depresión y ansiedad se pueden reducir con esto.
Asimismo, puedes ejercitar al cerebro.
Entre estos ejercicios están:
- Posturas de poder. Las manos en las caderas. Así podrás notar una disminución temporal de ansiedad social.
- Música relajante. Hay estudios de que las personas que escuchan música relajante después de un evento estresante se recuperan más rápido.
- Practicar la relajación muscular progresiva. Relajar y tensar músculos lentamente. Se puede combinar con escuchar música relajante o hacer ejercicios de respiración.
- Posturas de yoga. Realizar posturas de yoga durante unos puede aumentar el autoestima y aumentar los niveles de energía.
Recuperación de la salud mental
Los problemas de salud mental pueden ser tratados con éxito por la mayoría de quienes los padecen. Sin duda puedes mejorar. Sin embargo, hay algunos problemas crónicos y continuos, pero todavía pueden controlarse con tratamiento e intervenciones adecuadas.
Procura prestar atención continua a tu salud mental y general. Toma técnicas de terapia conductual para aprender a recuperarse de los problemas de salud mental con mayor facilidad en cada ocasión.
A veces será necesario continuar usando medicamentos, pero es posible dejar de usarlos en algún momento.
La recuperación significa diferentes cosas para diferentes personas.
Hacer conciencia sobre la salud mental
Los profesionales de la salud están preocupados también por la salud mental. Las enfermedades físicas son bien conocidas, pero nadie puede aceptar que la ansiedad, el TEPT y el pánico no tengan síntomas físicos.
Es importante que las personas sean conscientes de estos síntomas y signos comunes a través de campañas de sensibilización.
Año con año aumentan quienes padecen enfermedades mentales por millones.
Un sentido de pertenencia puede alentar a las personas a buscar ayuda profesional. Para el alivio de los síntomas y para mantener un estilo de vida activo y saludable, el tratamiento es esencial.
Tipos de profesionales de la salud mental
Hay varios tipos de profesionales de la salud mental, de acuerdo a tus objetivos de recuperación. Comprende las diferentes áreas de especialización y facilita tu búsqueda del profesional adecuado.
Revisemos algunos
- Psicólogos: evalúan a un individuo mediante entrevistas clínicas, evaluaciones psicológicas y pruebas mentales. También proporcionan terapia individual y de grupo.
- Consejeros, Clínicos, Terapeutas: Psicólogos espacializados en evaluar la salud mental y proporcionar técnicas terapéuticas. Operan bajo el título de consejero, médico o terapeuta, dependiendo del tratamiento y el espacio donde trabajan.
- Trabajadores Sociales Clínicos: con formación para evaluar la salud mental de una persona y utilizar técnicas terapéuticas de acuerdo con su formación específica. Su capacitación también incluye defensa y gestión de casos. Prescriben medicamentos.
- Psiquiatras: Brindan terapia, prescriben y supervisan medicamentos y diagnostican afecciones de salud mental.
Otros tipos de profesionales psicológicos:
- Enfermeras especializadas en psiquiatría/salud mental: Proporcionan evaluación, diagnóstico y tratamiento para condiciones psicológicas y abuso de sustancias.
- Médicos de Atención Primaria: recetan medicamentos, pero son más generales. Necesitas ver a alguien que se especialice en este campo para obtener más ayuda.
- Enfermeras de Familia: brindan atención médica general y recetan medicamentos.
- Farmacéuticos Psiquiátricos: para el manejo de medicamentos. Incluye evaluación de respuesta y modificación del tratamiento, manejo de reacciones a los medicamentos e interacciones entre medicamentos, y educación de los pacientes.
- Trabajadores Sociales Clínicos: Proporcionar administración de casos, servicios de planificación del alta para pacientes hospitalizados, servicios de colocación y otros servicios para apoyar una vida saludable.
- Especialistas pares certificados: experto en trastornos de salud mental o uso de sustancias que ha vivido una experiencia con estas condiciones. A menudo, estos profesionales están capacitados, certificados y preparados para ayudar a una persona a desarrollar metas y fortalezas para ayudar con la recuperación. Ellos brindan tutoría, orientación y apoyo.
- Consejeros Pastorales: miembros del clero con capacitación en educación pastoral clínica. Están capacitados para diagnosticar y brindar asesoramiento.
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